“Contraté a Ana cuando ya tenía 150.000 en Youtube, pero no había encontrado la manera de hacerla funcionar para que fuera un negocio. Mi mayor problema era sincronizar mi «yo artista» con mi «yo empresario» y eso era un gran problema. Ana me ayudó a encontrar la manera.

He sentido que era una parte del equipo ayudándome en múltiples facetas y etapas del desarrollo. De no ser un negocio en absoluto (apenas a cubrir gastos) a ser un negocio con el que si sólo me quedase con los ingresos online, ya viviría muy muy bien. A los pocos meses de trabajar juntos, de cero a facturar unas cuantas cifras importantes.

Ana analizó la web, analizó el problema y me propuso un modelo de negocio diferente más adaptado a mis capacidades y fue ponerlo y en mes y medio ya estaba todo en marcha.

Ana ha sido clave en ponerme los punto sobre las ìes, con su característica dulzura y suavidad pero también con mano firme.

Una de las cosas que más me gustó de trabajar con Ana fue que no es sólo que el negocio vaya cada vez a más sino el cuidado que tuvo conmigo de decirme: pero Marcos, ¿eso a ti te hace feliz? Ese punto de manejar el negocio y manejar calidad de vida, Ana ha sido una pata fundamental en este proceso.”